Monseñor Mario Luis Bautista Maulión falleció este domingo 27 de septiembre, a los 85 años, en la ciudad de Rosario, donde vivía desde 2010, cuando presentó su renuncia por edad y dejó el arzobispado de Paraná.

El deceso del arzobispo emérito se produjo a las 17.15 en la ciudad santafesina, luego de una larga enfermedad.

El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, presidirá hoy, lunes 28 de septiembre, una misa por el eterno descanso de monseñor Maulión en la catedral Nuestra Señora del Rosario. Será a las 16 y transmitida por el Facebook de la Iglesia Catedral.

"Lo recordamos en la oración, así como a su familia, pidiendo que el Señor los reconforte", expresó el prelado rosarino.

Los restos de monseñor Maulión serán cremados y luego trasladados a Paraná, donde serán inhumados en la catedral Nuestra Señora del Rosario, tal como era su voluntad.

La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) invitó a rezar por su eterno descanso.

Una vida pastoral, tres diócesis
Mons. Maulión nació en Carcarañá, provincia de Santa Fe, el 4 de diciembre de 1934 y fue ordenado sacerdote el 11 de junio de 1960 en la catedral de Rosario, por Mons. Silvino Martínez, obispo de Rosario.

Elegido obispo titular de Febiana y auxiliar de Rosario el 20 de marzo de 1986 por Juan Pablo II, fue ordenado obispo el 23 de mayo de 1986 en la catedral de Rosario, por Mons. Jorge Manuel López, arzobispo de Rosario (co-consagrantes Mons. Ubaldo Calabresi, nuncio apostólico y Mons. Desiderio Elso Collino, obispo de Lomas de Zamora).

Trasladado como obispo de San Nicolás de los Arroyos el 8 de mayo de 1995, tomó posesión de esa sede el 9 de julio de 1995, luego fue promovido a arzobispo de Paraná el 29 de abril de 2003, tomó posesión de esa sede e inició su ministerio pastoral como cuarto arzobispo de Paraná (noveno diocesano) el 9 de julio de 2003. Renunció por edad el 4 de noviembre de 2010.

En la Conferencia Episcopal era miembro de la Comisión de Migraciones y Turismo. Era licenciado en Filosofía (Pontificia Universidad Gregoriana, Roma) y su lema episcopal fue: "Me envió a evangelizar".