Sor André, religiosa de las Hijas de la Caridad, es la persona más anciana de Europa y la segunda persona más longeva del mundo, y en estos días ha ganado la lucha contra el coronavirus COVID-19 a los 117 años de edad.

La hermana André vive en la casa de retiro Sainte-Catherine-Labouré en la ciudad de Toulon (Francia), donde pasó estricta cuarentena luego de dar positivo a la enfermedad el 16 de enero.

La religiosa fue uno de los 81 residentes que contrajo la enfermedad y, según señaló al periódico local Var Matin, “ni siquiera me di cuenta de que estaba infectada”.

Sor André se encuentra muy tranquila y está ansiosa por celebrar su 117 cumpleaños mañana jueves según nació el 11 de febrero de 1.904. En el mundo, sor André es superada en edad solo por la japonesa Tane Tanaka de 118 años de edad.