El obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Vicente Ojea, advirtió que “hay que tener una vigilancia continua” sobre la situación de los más vulnerables en el actual contexto de crisis sociosanitaria por la pandemia.

“El esfuerzo del Estado es grande. Hay mucha ayuda, pero requiere una vigilancia continua. Estamos en un límite. La ayuda está y en muchos casos Cáritas la administra. Pero lo que sucede es que si se pierde la atención al grado de necesidad que hay, podemos entrar en situaciones que se nos pueden ir de las manos”, sostuvo el prelado en una entrevista con Télam.

Monseñor Ojea afirmó que el termómetro de la crisis se ve en los comedores que la Iglesia atiende en todo el país, al graficar: “Cuando vemos que los adultos comienzan a concurrir masivamente, es un paramento de que la situación no es fácil y estamos en un límite”.

El obispo de San Isidro insistió en que “no hay que perder la atención” sobre la situación social acuciante que viven los sectores más vulnerables, pese a destacar la instrumetación de Tarjeta Alimentar y otros planes sociales ante la emergencia.

“Se ha hecho un esfuerzo grande y Cáritas es testigo, pero al mismo tiempo hay que tener el ojo puesto en lo que falta”, sostuvo.

Monseñor Ojea recordó que el año pasado, al inicio de la pandemia y de las restricciones más duras, se llevó a cabo la campaña solidaria #SeamosUno, en que “ONG y grupos privados que colaboraron varios meses con donaciones de alimentos” y atribuyó que la iniciativa se haya descontinuado después por "cansancio, falta de medios”.

“Hoy, es el Estado el que está afrontando (la situación). Lo sabemos por Cáritas. Nos preocupa muchísimo el tema del hambre en el país. Tenemos que estar muy atentos y al mismo tiempo tener en el cuidado para que en los comedores haya un equilibrio alimenticio”, planteó.