La Pontificia Comisión para América Latina (PCAL) invita a unirse al rezo del Rosario Guadalupano con el papa Francisco prevista para mañana, domingo 12 de diciembre, fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, patrona de América Latina y el Caribe, con el lema "Con María, toda América unidos al Papa".

La PCAL explicó que la actividad busca reunir al pueblo de Dios que camina en la devoción guadalupana para orar junto al Santo Padre por las intenciones de todos los pueblos del mundo.

La agenda se iniciará a las 10.45 (hora de Roma) con el rezo del Santo Rosario que finalizará con una oración de consagración de los pueblos dirigida por el cardenal Marc Ouellet, prefecto de la Congregación para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina.

A las 12 se espera que el papa Francisco presida el rezo del Ángelus y entregue un mensaje relacionado con la devoción que no se restringe únicamente al pueblo mexicano sino que su mensaje se reviste de un carácter universal que invita a todo el pueblo de Dios a la conversión personal y pastoral.

En el reciente mensaje del Papa a la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe invitaba a preparar el camino hacia el Jubileo Guadalupano de 2031 y el Jubileo de la Redención en 2033, desde la oración y la acción pues se trata de un itinerario marcado por el llamado a la renovación eclesial y social que en este tiempo se propone a la Iglesia universal.

A diez años de estas conmemoraciones se hace necesario iniciar un camino contemplativo y formativo que acuda a la intercesión de la Virgen de Guadalupe para que nos permita crecer en la fe y la comunión eclesial, como una de las demandas pastorales de este tiempo.

Este año la celebración de la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe coincide con el tercer Domingo de Adviento, por eso desde el punto de vista litúrgico esta solo será celebrada en México mientras que en otros países se trasladará al lunes 13 de diciembre.

En México la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe comenzó oficialmente el 9 de diciembre con el inicio de un año jubilar en honor a San Juan Diego Cuauhtlatoatzin al cumplirse 20 años de su canonización. En el hecho guadalupano San Juan Diego es el puente entre el Cielo y los hombres, una demostración del Evangelio inculturado digno ejemplo de sinodalidad donde la Iglesia ministerial termina unida a la comunidad representada en San Juan Diego.