El Evangelio menciona la razón de ser de dicho nombre: “Porque va a salvar a su pueblo del pecado”. Jesús iba a obrar la Redención con los más atroces sufrimientos, humillándose, como dice San Pablo, “hasta aceptar la muerte y muerte de cruz. Por eso, Dios lo exaltó y le dio el Nombre que está sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús, doble la rodilla todo lo que hay en el cielo, en la tierra y en los abismos, y toda lengua proclame para gloria de Dios Padre: Jesucristo es el Señor”.