El 4 de abril el concejal ya había enviado una carta al mandatario “ante la falta de respuestas de Gustavo Martínez” y con la intención de resolver cuanto antes la situación.

“La propuesta es la sustitución de manera gradual de los equinos por motocargas o vehículos de tracción motora acordes para los trabajos que realizan”, explicaba Salom en la carta que envió hace algunas semanas al gobernador.

En ese sentido, el precandidato a intendente de Resistencia subrayó que la problemática de la tracción a sangre “requiere un abordaje no solo del municipio, sino también del Gobierno provincial”. Por ese motivo ya había solicitado la intervención de Capitanich en el caso, para trabajar en conjunto, pero no obtuvo respuestas.

Cabe recordar que, en marzo, Salom se reunió con carreros y hablaron sobre el proyecto de sustitución de la tracción a sangre mediante las motocargas. “Es inevitable el cambio y escuchar cada aporte ayuda a empatizar y ponernos en el lugar del otro”, había comentado tras la reunión.

El proyecto de autoría del concejal de la UCR busca que se cree un Registro Único Permanente de Vehículos de Tracción a Sangre, con tratamiento interdisciplinario, en el que, entre otras cosas, se especifique los datos de los propietarios del caballo, de la persona que lo utiliza, características del animal y qué actividades realizan, de sustento económico, movilidad u otra.

Por lo que se busca eliminar paulatinamente la tracción a sangre a través de motocargas, “que no se utilicen animales ni personas, como la propuesta del intendente Martínez con pedales, ya que es inviable para aquellos que circulan largas distancias y eso significaría cambiar la tracción animal por tracción humana”, explicó el precandidato.

Y en cuanto al método que propone el actual intendente cerró diciendo: “Además conspira contra la seguridad de todos, no solo de los que van a andar en los triciclos, sino que debemos velar por la seguridad de todos los vecinos”.