Monseñor Jorge Lozano, arzobispo de San Juan de Cuyo, señaló que “hay reacciones que brotan espontáneamente” y puso como ejemplo el caso de un niño que, cuando se lastima o le duele algo, enseguida busca a su mamá. 

“La misma reacción surge ante una amenaza o situación de miedo. Ir a su regazo para sentir cobijo, ternura, consuelo, fortaleza, seguridad”, aseguró en su reflexión semanal. 

“Es la madre la que sabe comprender, la que acompaña, cuida, da confianza y vuelve a poner en camino. No absorbe”, detalló.

El arzobispo sanjuanino contó que “con esta confianza y estos sentimientos en el corazón” el jueves pasado el obispo que participaron de la Asamblea Plenaria fueron al santuario de la Virgen de Luján.

“A ella, patrona de nuestra Patria, quisimos llevarle el sufrimiento de los pobres, de los enfermos, de los descartados, de los que no tienen trabajo. Pensamos también en tantos adolescentes, jóvenes que están presos de la droga o alguna otra adicción. En el corazón llevamos a las familias que sufren violencia y división”, puntualizó.

En lo personal, monseñor Lozano contó que “ante la imagen bendita estuve rezando un rato, recordando y reviviendo imágenes, historias y rostros concretos que recogemos en las comunidades, en cada rincón de nuestros barrios y de los lugares más cercanos y más alejados”. 

“Todas esas experiencias de vidas rotas las puse en el corazón de María para que ella los abrace y les haga sentir su ternura y su consuelo”, agregó.

Monseñor Lozano también recordó que el Episcopado convocó a todas las comunidades del país para que el próximo viernes 17 de noviembre recen por la Patria, especialmente en momentos que definió “tan necesitados de la ayuda y el auxilio de Dios con el bendito propósito de que podamos vivir como hermanos". También pidió rezar por la paz en el mundo.