El obispo Rolando Álvarez, detenido desde hace más de un año, el obispo Isidoro del Carmen Mora Ortega, dos seminaristas y 15 sacerdotes fueron liberados por el gobierno de Nicaragua y deportados al Vaticano. El Gobierno de Nicaragua confirmó la noticia tras alcanzar un nuevo acuerdo con la Santa Sede.

"La Presidencia de la República, el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional y el Pueblo de Nicaragua agradecemos profundamente al Santo Padre, Papa Francisco por las muy respetuosas y discretas coordinaciones realizadas para hacer posible el viaje hacia el Vaticano de dos obispos, quince sacerdotes y dos seminaristas", publicó la presidencia nicaragüense en un comunicado. 

Los religiosos salieron de Nicaragua en un vuelo que partió en la noche del sábado 13 de enero de Managua hacia el Aeropuerto Internacional de Maiquetía en Venezuela y luego hacia Europa. Todos llegaron a Roma el domingo por la tarde, a excepción de uno que permaneció en Venezuela.

El obispo de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, monseñor Rolando Álvarez, sentenciado a 26 años de prisión, se encontraba detenido desde febrero del año pasado luego de estar bajo arresto domiciliario desde agosto de 2022. El obispo Mora fue arrestado en diciembre.

El gobierno de Daniel Ortega destacó además que los 19 religiosos fueron recibidos por autoridades vaticanas "en cumplimiento de acuerdos de buena fe y buena voluntad, que buscan promover entendimiento y mejorar la comunicación entre la Santa Sede y Nicaragua, para la paz y el bien" y agrega: "Reconocemos las posibilidades del diálogo franco, directo, prudente y muy serio, un diálogo responsable y cuidadoso, que ha hecho posible llegar a este día de alabanza al Dios de todos, que nos ilumina y guía para continuar cultivando la confianza y para acrecentar, desde la Fe, la tranquilidad de Espíritu y el derecho a la justicia y la vida de las familias nicaragüenses". 

Por su parte, el subsecretario de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Brian Nichols, se mostró "tranquilo" por su liberación al mismo tiempo que calificó su expulsión de "injusta". "(Las autoridades nicaragüenses) expulsaron hoy a 19 clérigos católicos injustamente detenidos, incluyendo al obispo Álvarez. Nos tranquiliza ver la liberación de estos líderes religiosos. Todas las personas tienen derecho al culto en casa y en el extranjero", publicó Nichols en su cuenta de la red social X. Asimismo, insistió en su llamamiento a la liberación de "todos los injustamente detenidos" y al "restablecimiento de las libertades fundamentales" en el país.

En el Ángelus de principios de año, el Papa habló de la situación de los obispos y sacerdotes "privados de libertad" en el país centroamericano. Aseguró a todos su "cercanía en la oración" e invitó al pueblo de Dios a orar por Nicaragua, expresando su esperanza "de que siempre se busque el camino del diálogo para superar las dificultades".

Ya en octubre, 12 sacerdotes nicaragüenses fueron liberados de prisión. La Santa Sede aceptó entonces la petición de recibirlos, acogiéndolos en Roma y proporcionándoles alojamiento.

Más de 18 meses encarcelado
El obispo de Matagalpa, conocido defensor de los derechos humanos y crítico del régimen de Daniel Ortega, fue obligado a permanecer recluido dentro de su casa episcopal desde inicios de agosto de 2022, junto a algunos sacerdotes, seminaristas y un laico.

Dos semanas después, casi habían quedado desabastecidos de alimentos, la policía nicaragüense irrumpió en la casa y se llevó secuestrado a monseñor Álvarez rumbo a Managua, la capital del país, donde lo sometieron a arresto domiciliario.

En medio de un cuestionado proceso, la dictadura condenó al obispo de Matagalpa el 10 de febrero de 2023 a más de 26 años de cárcel, acusándolo de “traidor a la patria”. Desde entonces, fue recluido en la prisión conocida como “La Modelo”, a la que son enviados los presos políticos del régimen.

Monseñor Isidoro Mora fue arrestado por las autoridades nicaragüenses el 20 de diciembre de 2023, en medio de una ola de secuestros del régimen contra sacerdotes católicos que sumó más de 15 detenciones sólo en ese mes. Monseñor Mora había celebrado la misa un día antes en Matagalpa, donde había alentado a los fieles a rezar por el obispo Álvarez. En los últimos días se intensificaron los llamados de la Iglesia Católica a la paz en Nicaragua.